De tanto que he vivido, he visto tanto
que ya nada me turba ni enajena;
nada hay que se merezca mi condena
ni nada venerable o sacrosanto:
De tanto que he llorado estoy sin llanto
y son mis ojos dos pozos de arena;
¿ qué habrá que a mí me importe o me de pena?.
¿ qué habrá que a mí me importe o me de pena?.
Curado y bien curado estoy de espanto.
De tanto vapulear esta piel mía
se ha vuelto una coriácea badana,
inmune al resquemor y a la alegría;
¿ Qué me importa a mí el Ayer, Hoy y Mañana,
¿ Qué me importa a mí el Ayer, Hoy y Mañana,
si vivo en puro estado de atonía
y estoy aproximándome al Nirvana ?
No hay comentarios:
Publicar un comentario