domingo, 30 de octubre de 2011

El obrero manso

¿ Qué fue del obrero arisco,
vitalicio luchador,
indomable y levantisco,
dispuesto a armar siempre el cisco,
siempre a su fuero avizor?
¿ Qué se hizo de aquel ser
de bravura acrisolada,
temible a más no poder,
porque no tenia nada
que perder?
Ahora es manso y maleable,
dialogante y poco activo,
medroso y acomodable
al rollo competitivo.
Ahora acepta lo que le echa
el Poder desde la altura,
desde contratos "basura",
 a empleos precarios...! Pecha
con todo la criatura¡.
¿ Será que agota el luchar?
¿Será que se ha aburguesado?
¿Será que teme arruinar
lo poco que ha conquistado?
¿Será que todo al cambiar
hasta el obrero ha cambiado?
A mí me causa tristeza
sus tragaderas sin par,
su mermada fortaleza,
su fatalista callar...
! Ah, si alzaran la cabeza,
Luxemburgo, Lenin, Marx¡.

No hay comentarios:

Publicar un comentario